REVISTA DE POR ACÁ

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lunes, 10 de noviembre de 2008

Avala Semarnat plan turístico en Los Cabos, pese a riesgo ambiental


El proyecto pertenece a consorcio español, cuyo representante en México es John McCarthy

■ Margina la dependencia opinión de expertos sobre el complejo al autorizar la MIA

Angélica Enciso L.

Pese a las omisiones en materia ambiental y los riesgos para el parque nacional Cabo Pulmo, ubicado en Los Cabos, Baja California Sur, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) autorizó en septiembre la manifestación de impacto ambiental (MIA) del complejo turístico Cabo Cortés.

El proyecto, planificado para el parque considerado de alta biodiversidad, pertenece al consorcio español Hansa, cuyo representante en México es John McCarthy, director del Fondo Nacional de Turismo (Fonatur) durante el gobierno de Vicente Fox.

Las opiniones de expertos que participaron en la consulta pública del complejo, efectuada en junio pasado, fueron ignoradas por la Semarnat al momento de autorizar la MIA, señaló Peter Paterson, de la organización Guardianes del Agua. El proyecto afectaría sobre todo a Cabo Pulmo, de relevancia internacional por su biodiversidad, señaló el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda).

Cabo Cortés es un megaproyecto planeado en Los Cabos, el cual contará con hoteles, villas, campos de golf y marina. McCarthy participó, presuntamente, en su gestión al frente de Fonatur, en actividades privadas que favorecieron a las empresas que promueven este plan; específicamente en la compra de alrededor de mil 500 hectáreas de El Rincón, Los Cabos (La Jornada, 3/11/08).

Respecto al impacto de la construcción de este desarrollo turístico hacia Cabo Pulmo, el biólogo marino Héctor Reyes Bonilla sostuvo en sus comentarios, presentados en una consulta pública, que si bien en la MIA se analizaron los potenciales impactos que la construcción y puesta en operación de Cabo Cortés pudiera tener sobre el arrecife, “se obvió que el problema principal que plantea el proyecto quizá no sea éste, sino la elevación dramática del nivel de uso que el parque tendrá a partir del inicio de la construcción del complejo, y especialmente una vez que se abra al público”.

Agregó que uno de los atractivos del proyecto es la cercanía con el arrecife, el cual se encuentra en una de las zonas mejor conservadas del Golfo de California.

“Ante esto, es de esperarse que tanto los turistas como los mismos trabajadores de Cabo Cortés visitarán frecuentemente la zona protegida. Los niveles actuales de uso del parque no superan los 300 visitantes anuales, y, si consideramos tan sólo un 10 por ciento del número de habitaciones citado en la MIA (3 mil cuartos de hotel y como mínimo dos personas por habitación), en un día la cifra de personas que visitarán Cabo Pulmo superará la situación actual. Es obvio que aún con un buen control de las actividades, la contaminación química y auditiva afectará notablemente a las poblaciones de invertebrados y peces del arrecife en el futuro”.

El Cemda encontró otras inconsistencias del proyecto, entre las que están que no se respeta el Programa de Ordenamiento Ecológico Local de Los Cabos, el cual prohíbe la construcción en zonas de dunas costeras, pero el complejo considera abrir un canal de acceso y desarrollar una marina que afectará esas áreas. Tampoco se hizo una evaluación de los impactos ambientales que pueden ocasionar las actividades náutico marinas ligadas al proyecto; tan sólo se señala que se utilizará “el manual de buenas prácticas en manejo de marinas, que habrá actividades o un programa de educación ambiental y que se realizarán compromisos pertinentes con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas”, indica la organización sobre el plan.

El Cemda señala que los estudios de campo para la detección de especies de flora y fauna con presencia en el predio del proyecto, “no fueron elaborados a lo largo de todo el régimen estacional y migratorio, y sólo en un periodo”, por lo cual habría variedades no consideradas. También, indica, hay impactos de los cuales no existe evaluación, como el que mientras se pone en operación la desaladora para obtener agua potable, en las primeras etapas de la construcción la empresa planea extraer agua del acuífero Santiago, uno de los pocos que no están sobrexplotados en la región, y que abastece de agua a poblaciones.

Publicado en el diario La Jornada el 10 de noviembre de 2008. Obtenido en esa fecha de: http://www.jornada.unam.mx/2008/11/10/index.php?section=sociedad&article=041n1soc

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